150 Días de Oración por las Almas del Purgatorio

La devoción de los 150 días de Oración por las almas del purgatorio es una práctica espiritual profundamente arraigada en la tradición católica. Esta devoción, basada en la fe en la misericordia divina y el poder de la intercesión, ofrece un camino de esperanza y consuelo para aquellos que desean ayudar a las almas que sufren en el purgatorio.

Día 1:
Comienza con una breve invocación al Espíritu Santo para pedir luz y guía en tus oraciones.

"Ven, Espíritu Santo, ilumina nuestras oraciones y lleva nuestras súplicas al Padre, para que las almas del purgatorio encuentren consuelo y descansen en su misericordia. Amén."

Luego, reza 3 veces la Oración de la Salve Regina y ofrece tu intención por las almas del purgatorio.

"Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos. Y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clemente, oh piadosa, oh dulce Virgen María!"

Día 2-10:
Reza el Rosario completo, meditando en los misterios correspondientes al día (gozosos, luminosos, dolorosos o gloriosos), ofreciendo cada decena por las almas del purgatorio.

Día 11-20:
Reza la Coronilla de la Divina Misericordia, comenzando con la cruz y luego recitando el Padre Nuestro, el Ave María y el Credo. Luego, en cada cuenta del Rosario pequeño, di la siguiente oración: "Por su dolorosa Pasión, ten misericordia de ellas y del mundo entero".

Día 21-30:
Reza la Oración de Santa Gertrudis por las almas del purgatorio: "Eterno Padre, te ofrezco la Preciosísima Sangre de Tu Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy en todo el mundo, por todas las santas almas del purgatorio, por los pecadores en todas partes, por los pecadores en la Iglesia universal, por aquellos en mi casa y en mi familia. Amén".

Día 31-40:
Ofrece una lectura bíblica sobre la misericordia de Dios y reflexiona sobre ella en silencio durante unos minutos. Luego, reza tres veces la Oración del Cordero de Dios: "Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, danos la paz."

Día 41-50:
Reza la Oración de las Benditas Almas del Purgatorio: "Oh Jesús, Misericordiosísimo Redentor, por amor a las almas benditas del purgatorio, cuyo deseo ardiente es estar contigo, ten misericordia de ellas. Te ruego que me concedas la gracia de poder cumplir y vivir santamente y así, después de mi muerte, gozar de tu eterna bienaventuranza. Amén".

Día 51-60:
Reza el Credo Niceno-Constantinopolitano, profesa tu fe en Dios y su misericordia infinita, ofreciendo cada palabra por las almas del purgatorio:

"Creo en un solo Dios,
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible e invisible.
Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros, los hombres,
y por nuestra salvación bajó del cielo,
y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen,
y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado
en tiempos de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día, según las Escrituras,
y subió al cielo,
y está sentado a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria
para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida,
que procede del Padre y del Hijo,
que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración
y gloria, y que habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.
Confieso que hay un solo bautismo
para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo futuro. Amén."

Día 61-70:
Reza la Oración a San José por las almas del purgatorio: "Oh glorioso San José, protector de las almas del purgatorio, ruega por tus hijos e hijas y obtén para ellos el perdón de sus pecados y la liberación del sufrimiento. Amén".

Día 71-80:
Reza la Oración a María, Reina del Purgatorio: "Santa María, Madre de la Misericordia, Reina del Purgatorio, intercede por las almas de tus hijos e hijas que sufren en el purgatorio. Que tu ternura maternal les conceda el consuelo y la esperanza de alcanzar la gloria eterna. Amén".

Día 81-90:
Reza la Oración de la Confianza a la Divina Misericordia: "Oh Jesús, confío en Ti. Tú eres la misericordia infinita. Confiadamente, encomiendo a Ti las almas del purgatorio, sabiendo que tu amor y misericordia nunca fallan. Amén".

Día 91-100:
Recuerda en silencio a las almas del purgatorio por las que has estado rezando y ofrece tus sacrificios y buenas obras del día por su descanso eterno.

Día 101-110:
Reza la Oración de los Santos Ángeles Custodios por las almas del purgatorio: "Santos Ángeles Custodios, que veláis por nuestras almas con amor y cuidado, rogad por las almas del purgatorio para que, a través de vuestra intercesión, encuentren el descanso eterno y la paz. Amén".

Día 111-120:
Ofrece una oración espontánea desde el corazón por las almas del purgatorio. Pídele a Dios que les conceda la gracia de la liberación y la entrada al cielo, que les brinde consuelo y fortaleza en su purificación y que les conceda la paz eterna. Puedes expresar tus propios pensamientos y sentimientos, ofreciendo palabras de amor, esperanza y misericordia.

Día 121-130:
Reza la Oración de la Ofrenda Diaria: "Señor, recibe nuestra ofrenda diaria de oraciones y sacrificios por las almas del purgatorio. Concédeles el descanso eterno y la luz perpetua. Amén".

Día 131-140:
Reza la Oración a San Miguel Arcángel por las almas del purgatorio: "San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla y protege a las almas del purgatorio de los ataques del maligno. Que tu espada poderosa les conceda la victoria y la liberación. Amén".

Día 141-150:
Para concluir los últimos 10 días de oración, puedes ofrecer una oración de acción de gracias simple y sincera, expresando tu gratitud a Dios por permitirte participar en esta devoción y por la esperanza de la vida eterna para las almas del purgatorio. Aquí te propongo una oración:

"Oh Dios misericordioso y amoroso, te doy gracias por permitirme dedicar estos 150 días de oración por las almas del purgatorio. Concede, Señor, el descanso eterno a todas las almas y fortaléceme en mi fe y devoción. Que tu infinita misericordia brille sobre ellas y las lleve a la luz eterna. Amén."